Cirugías de los conductos biliares

Conocida como colecistectomía, la cirugía para extirpar la vesícula biliar está indicada cuando se identifican cálculos biliares después de pruebas de imagen o de laboratorio, como orina, o cuando hay signos indicativos de inflamación de la vesícula biliar.

Las cirugías de los conductos biliares se pueden realizar de 2 formas:

  • Cirugía convencional (o de corte): también conocida como cirugía abierta, se realiza a través de un corte más grande en el abdomen para extirpar la vesícula biliar. Suele tardar un poco más en recuperarse y deja una cicatriz más visible;
  • Cirugía por laparoscopia (o por video): se hacen 4 orificios en el abdomen, por donde el médico pasa el material y una pequeña cámara para realizar la cirugía. Tiene una recuperación más rápida, menos dolor y menos cicatrices.

Ambas cirugías se realizan bajo anestesia general y por lo general solo requieren de 1 a 2 días en el hospital. Sin embargo, si el abdomen está muy hinchado, como ocurre con algunas complicaciones de los cálculos biliares, la recuperación puede llevar más tiempo.

Los riesgos de la cirugía de las vías biliares son mínimos, sin embargo, los más graves son el daño de las vías biliares, hemorragia o infección que puede ocurrir en cualquier intervención quirúrgica.

INFORMAÇÕES DO AUTOR:

Dr. Marcel Autran Machado Especialista em cirurgia do aparelho digestivo e cirurgia minimamente invasiva

Professor livre-docente de Cirurgia pela Universidade de São Paulo, graduado pela Faculdade de Medicina da USP (FMUSP) e com residência em Cirurgia Geral e do Aparelho Digestivo pela mesma instituição.
CRM-SP nº 70330