CIRUGÍA VIDEOLAPAROSCÓPICA CON ROBOT (CIRUGÍA ROBÓTICA)

La cirugía videolaparoscópica mediante plataforma robótica, comúnmente llamada Cirugía Robótica, surgió en los últimos años como la última frontera del desarrollo técnico aplicado a la videocirugía. Como tal, no es más que una videocirugía asistida por robot.

La robótica añade algunas ventajas al método puramente laparoscópico. Con el sistema robótico, el cirujano tiene una visión tridimensional real del campo quirúrgico y su posicionamiento, sentado con los brazos apoyados, proporciona una excelente ergonomía.

Los instrumentos de cirugía robótica se desarrollaron especialmente para brindar al cirujano un rango de movimiento similar al de la mano humana y pueden lograr una rotación de hasta 360 grados.

La libertad de movimiento de las pinzas robóticas proporciona un aprendizaje rápido e intuitivo. El robot también se puede ajustar para realizar movimientos con amplitud de escala reducida, lo que permite suturas en espacios reducidos con gran aplomo. Además, elimina los temblores dando una gran precisión de movimientos.

INFORMAÇÕES DO AUTOR:

Dr. Marcel Autran Machado Especialista em cirurgia do aparelho digestivo e cirurgia minimamente invasiva

Professor livre-docente de Cirurgia pela Universidade de São Paulo, graduado pela Faculdade de Medicina da USP (FMUSP) e com residência em Cirurgia Geral e do Aparelho Digestivo pela mesma instituição.
CRM-SP nº 70330

En los procedimientos laparoscópicos avanzados, a menudo se necesitan grapadoras para controlar los vasos grandes. El robot permite suturas de forma muy rápida y rápida, lo que permite controlar grandes vasos sin el uso de grapadoras endoscópicas.

El sistema robótico permite refinamientos técnicos gracias a la visualización tridimensional del campo quirúrgico y el uso de instrumentos precisos con un amplio rango de movimiento que simulan los movimientos de la mano humana.

La desventaja inicial de este método fue el costo, que se redujo gradualmente con el mayor uso del método y las asociaciones entre médicos y hospitales. Hoy en día, algunos hospitales no cobran tarifas adicionales por usar el robot en algunos procedimientos complejos, como cirugías de hígado, páncreas y vías biliares.

Este método se implementó en Brasil y América Latina a principios de 2008. Ese mismo año, comenzamos nuestra experiencia con cirugías robóticas pioneras de hígado¹ y páncreas² (publicado en ese momento).

En los procedimientos videolaparoscópicos más simples, como la colecistectomía y las apendicectomías sin complicaciones, la cirugía robótica agrega pocas ventajas, ya que estos procedimientos se realizan muy fácilmente con el método videolaparoscópico convencional. Sin embargo, hemos utilizado habitualmente el robot en algunos procedimientos menos complejos como la corrección del reflujo gastroesofágico, la corrección de hernias inguinales y otras hernias de la pared abdominal.

La mayor ventaja de utilizar la cirugía robótica se produce en los procedimientos más complejos. En el campo de la cirugía general y del tracto digestivo, los procedimientos que más se benefician de este método son las cirugías de páncreas, hígado y conductos biliares.

Desde 2018, hemos estado utilizando el robot en todas estas cirugías en lugar de laparoscopia. Con esto pudimos incrementar la proporción de pacientes que se benefician del método mínimamente invasivo, pues en algunas situaciones donde el uso de laparoscopia no era posible y necesitábamos el uso de cirugía abierta, hoy con el robot esto no solo es posible. pero también deseado.

Un ejemplo de esto es su uso en tumores Klatskin³, es decir, colangiocarcinoma hiliar³. Otro ejemplo importante es su uso en el cáncer de páncreas. En la actualidad, nuestro equipo realiza de forma rutinaria cirugías como la duodenopancreatectomía4 o la cirugía de Whipple4 de forma robótica. En casos de invasión vascular, previamente contraindicación respecto al uso de laparoscopia, el uso del robot facilita su actuación segura en casos seleccionados.

Otro uso frecuente del robot se da en pacientes que ya se han sometido a múltiples cirugías abiertas, donde la mayoría de los cirujanos del mundo contraindican la cirugía mínimamente invasiva por la presencia de adherencias. La cirugía robótica ayuda mucho en la liberación de adherencias y así, podemos realizar cirugías, incluso complejas, en estos pacientes.

El uso del robot en esta situación proporcionará un mejor resultado postoperatorio, además de permitir que se sigan realizando más cirugías por una ruta mínimamente invasiva, ya que una vez que se liberan las adherencias mediante esta técnica, no se vuelven a formar con la misma intensidad. Una cirugía de hígado5 en esta situación extrema fue objeto de una publicación en una revista internacional5.

Otro uso importante es en cirugías complejas de la vía biliar, como en los casos de estenosis (estrechamiento) de la vía biliar causada por lesiones accidentales durante cirugías previas o por otras causas. Una cirugía de la vía biliar en esta situación extrema fue el tema de una de nuestras publicaciones en una revista internacional6.

¿Cómo se realiza la cirugía robótica? A través de pequeñas incisiones (Figura 1), por donde ingresan los trócares (cánulas por donde ingresan las diferentes pinzas robóticas, ópticas y otros instrumentos). El robot utiliza 4 trócares. El cirujano asistente utiliza un trocar adicional para introducir suturas, aspirador, engrapadora, etc. (Imagen 1). El cirujano se encuentra en una consola (Imagen 2) desde donde controla el movimiento de los 4 brazos del robot (cámara y 3 pinzas). (Imágenes 3 y 4). El video 1 muestra cómo funciona el sistema robótico.

  • 1 – 063 Resección robótica de hígado. Informe de experiencia pionera en América Latina
  • 2 – 135 Resección robótica de neoplasia intraductal de páncreas
  • 3 – 215 Resección robótica de colangiocarcinoma hiliar
  • 4 – 200 Pancreaticoduodenectomía robótica después de bypass Roux-en-Y gástrico
  • 5 – 198 Hepatectomía derecha robótica de repetición para metástasis hepática colorrectal recurrente
  • 6 – 203 Hepatectomía izquierda robótica y Roux-en-Y hepaticoyeyunostomía

IMAGEN 1

El dibujo esquemático muestra el tipo y la posición de los trócares utilizados para la cirugía robótica. La cámara (C) se utiliza en dos posiciones diferentes. El puerto auxiliar (12 mm) utilizado por el cirujano de cabecera (esfera roja). Debe mantenerse una distancia mínima de 8 cm entre los brazos robóticos (esferas azules).

A continuación, se muestra una vista del abdomen después de la colocación de los trócares. El procedimiento realizado en este paciente fue una pancreatoduodenectomía robótica.

IMAGEN 2

A la izquierda vemos la consola con vista 3-D. A la derecha vemos los pedales de control. En la consola el cirujano puede controlar la posición de la cámara y tres brazos robóticos, dos a la vez y el tercero está posicionado para asistencia y está fijo. Para hacer esto, el cirujano usa una combinación de pedales y brazos (mangos).

IMAGEN 3

A la izquierda, vemos al cirujano principal sentado en la consola con una vista de inmersión en 3D durante el procedimiento. A la derecha, vemos el robot antes de ser cubierto con una funda estéril e introducido en el campo quirúrgico (docking).

IMAGEN 4

A la izquierda vemos de cerca los controles manuales (manijas). A la derecha, vemos algunos de los controles disponibles para el cirujano durante el procedimiento.

VÍDEOS

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